a veces lo imposible solo cuesta un poco más.

¿Hasta donde llega la fuerza psicológica de una persona? A saber, pero yo la mía la estoy poniendo demasiado a prueba. Tal vez en algún momento me juegue una mala pasada, y no me extrañaría. No me gustan las cosas fáciles, es cierto. Pero a veces siento como si algo fuese en contra de mí. Pienso que no es posible que me quede siempre a las puertas de conseguir lo que me propongo por más que me esfuerce. Me pesa decepcionar a una persona o personas y darme cuenta de que en realidad me importa más de lo que pensaba. Me pesa decepcionarme a mí misma en determinados aspectos que no llego a lograr. Me pesa no confiar en nadie, no echar de menos a nadie, no necesitar a nadie, sentir que nadie me aporta nada, pensar de todas las personas del mismo modo porque algunas me hayan traicionado y porque en algunas vea hipocresía. Me pesa no tener apoyo de nadie para nada y que no se reconozca el empeño que pongo en conseguir mis objetivos, aunque parezca no ser suficiente. 

Estoy cansada de las mismas palabras, de las mismas promesas, del mismo tipo de gente. Tengo la esperanza de que una parte de esto se arregle con una mejor organización pero, ¿el resto?

es muy fácil prometer el cielo.

No eres capaz de notar que cuando nos miramos hay cosas escondidas detrás de esa mirada que no la hace sincera. No te das cuenta de que cuando me das la mano ya no lo hago con ganas, ya no me sale apretarte fuerte y tirar de ti, ante cualquier circunstancia. Tampoco notas que si me das un abrazo ya no te siento, no me transmite nada. No eres capaz de ver que las traiciones se acumulan y mi paciencia se agota o, peor aún, lo ves y lo obvias porque parece que dejando al tiempo que solucione las cosas todo va a ser más fácil. Lo que no ves es que el tiempo solo lo empeora. 

comprobado.

Un plan improvisado siempre supera las expectativas para una simple tarde-noche. 

welcome spring

Quiero volver a vivir toda esa magia, la que a veces nos abraza y nos hace sentir bien. Quiero llegar a querer con todo el alma, perder todo el miedo que acompaña, que bloquea y que me engaña.

desfase.

Preparada para hacer este fin de semana inolvidable. Después de dos largos meses estamos a un día del fin de semana más esperado de lo que llevo de vida. Después de una larga semana ya estamos a jueves, ya sólo queda algo más de 24 horas para llegar a mi querida ciudad, Madrid. Dos días de auténtico desfase.

Vamos viernes, llega ya.

after a hurricane comes a rainbow

Definitivamente el hecho corrobora las palabras. A veces sólo hace falta una pequeña prueba de las que le gusta al destino para darte cuenta de que has ganado. Lo importante no es ganar una batalla, sino la guerra. Porque al final, con esfuerzo y pasando una época jodida, consigues el resultado que esperabas. Y te reafirmas en que todo es proponérselo, esforzarse y sacrificarse.Y sentirse ganador en el amor no tiene por qué ser tener a una persona al lado con quien pasar el rato y divertirte, si eso no es completamente verdadero, claro. Ganar en el amor es también ver que una persona a quien considerabas soberbiamente perfecta, demuestra ser una más de tantas y darte cuenta. Ganar en el amor es hacer lo que sientes, respetando a todos y, sobre todo, a ti mismo y conseguir una satisfacción plena contigo mismo. Hacer lo que sientas sin perjudicar a los demás y menos a quienes harían cualquier cosa por ti. Todo el esfuerzo ha servido y estoy orgullosa. Porque a veces el desamor no es una desgracia, sino una de las mejores lecciones que te puede dar la vida y que como todo, se pasa.

hablando de inconsciencia..

La mente llega a ser increíble. Es curioso como en determinadas ocasiones se consigue crear la concepción sobre alguien que más interesa, sea más o menos parecida a la realidad. De esta manera, cuando atribuyes cualidades desfavorables para la persona porque lo que te interesa es tener una visión lo más negativa posible, el resultado es un rechazo brutal hacia dicha persona. Lo mejor es que, por lo que parece, llegas a creerte que esa persona es verdaderamente así, y tú odias que una persona tenga esas cualidades, por lo que no quieres ni oír hablar de ella. Yo no lo he experimentado, más que nada porque me parece un acto de cobardía inmenso. Conscientemente se consigue deshacerse de todo pensamiento relacionado con esa persona, pero inconscientemente, ¿desaparece también esa persona? No lo sé. Lo que sí está claro es que te llegas a sentir bien y, me imagino, libre de esa persona aunque el resultado final y real sea que esa actitud haga que ya no signifiques nada para ella y la pierdas para siempre.

esto es para valientes

Estudiar derecho es esto. Es no tener vida social, es no dormir, es vivir por y para ello. Es hincharte de estudiar y no obtener resultados en unas ocasiones, o no obtener los resultados esperados en otras. 

Estudiar derecho es ver lo bien que se lo pasan tus amigos, lo muchísimo que salen, la gente nueva que conocen. Es tragarse las novedades que tienen que contarte y poner buena cara, mientras tú, lo único novedoso que tienes que contar es que te sabes un tema más. Es sentirse ligeramente apartada, verlos cada vez más lejos aunque ni se den cuenta. Es aguantar la compostura ante ellos y pensar que estás haciendo lo correcto, lo que en realidad deseas.

Los días pasan y tú sigues igual, terminas la época oficial de exámenes pero es como si siguieras de exámenes, todo el año. Exámenes en febrero y marzo, exámenes en junio, exámenes en septiembre y exámenes en diciembre. Da igual que te guste estudiar, da igual que pongas empeño, tienes exámenes todo el año y agota. 

Estudiar derecho es mirar al futuro y no ver vacaciones hasta que se te haya pasado el arroz. Hay que aceptarlo. Pero, estudiar derecho también es responsabilidad, sacrificio desmesurado, aprender a diferenciar las prioridades. Es aprender a superarse profesionalmente. Es ver resultados y alegrarte, no ver resultados y no hundirte, sino tener más motivación para avanzar. Es tener claro que quieres aprender aunque no puedas salir de fiesta. Estudiar derecho es sentirse libre. 

Es evidente que para estudiar derecho ha de gustarte estudiar, querer aprender y conocer, estar dispuesto a sacrificar tu tiempo de ocio porque si no, estás perdido. Al fin y al cabo, esto es un reto y qué mejor reto que superarse día tras día y ver que tus posibilidades aumentan.

la nieve se ha deshecho del todo

No hay nunca un porqué para un recuerdo, llega de repente así, sin pedir permiso. Y nunca sabes cuando se marchará. Lo único que sabes es que lamentablemente volverá. Aunque por lo general son instantes. Y ahora sé como hacerlo. Basta con no detenerte demasiado. En cuanto llega el recuerdo, hay que alejarse rápidamente, hacerlo en seguida, sin miramientos, sin concesiones, sin enfocarlo, sin jugar con él. Sin hacerse daño. Así, mucho mejor... Ahora ya ha pasado. Ahora yo domino los recuerdos y no ellos a mí.

Después de arder el fuego ya no es ni humo

porque sí

Toda palabra que tenga para vosotras se queda corta, simplemente gracias por existir.

Os quiero.

libre como el aire

Hoy es uno de esos días que, de verdad, empieza con una sonrisa. ¿Sabes cuando miras en derredor y todo te parece más bonito: los árboles que te rodean, el cielo o una nube tonta con aire de tener algo que decir? Pues eso, en pocas palabras, que te sientes en perfecta sintonía con el mundo, tienes lo que se dice un buen feeling... Con el mundo, además. Será porque por fin ha habido algo que me ha demostrado que es verdad lo que pensaba y sentía, que soy completamente libre de él, que es verdad que él ya no tiene cabida en mi vida y que puede decir o hacer lo que le venga en gana que a mí no me perjudica. Me es indiferente. Yo soy yo con mi vida, con la gente que me quiere. Soy feliz, hoy me siento eufóricamente feliz, pero voy a utilizar esa felicidad en pequeñas dosis cada día para no malgastarla, porque esta sensación es tan placentera como un orgasmo. Y tengo ganas de gritar al mundo que soy felicérrima, que amo mi vida y amo mi vida sin él. Y me da igual lo que piense quien sea, sólo yo sé cómo me siento y es lo que importa.

A volar.

las cosas hay que dejarlas claras!

Hoy, mañana y el resto de mis días.